El proceso de duelo puede ser devastador para los familiares y amigos, en especial si se trata de un familiar directo como madre, padre, hijos o cónyuges. En general, cuando una vida termina, al mismo tiempo comienzan una serie de luchas por retomar la paz que este suceso llevó, y en el proceso se pueden enfrentar períodos de depresión, angustia, ansiedad o enojo que podrían afectar gravemente la vida del doliente.
Como todos sabemos, el 2020 marcó un antes y un después para la humanidad. La pandemia por el Covid-19 se esparció por los cinco continentes tan rápido, que prácticamente ningún gobierno tuvo tiempo de anticipar una estrategia para sus sistemas sanitarios. Según datos de Our World in Data, tan sólo en México han habido más de 285 mil muertes relacionadas al nuevo coronavirus. Además de la emergencia de Salud Pública, también hubo una ola de familiares que, además de perder a sus seres queridos, no tuvieron la oportunidad de despedirse debido a las restricciones de seguridad.
Un duelo es ya de por sí difícil de procesar, por lo que, el agregar los factores de una crisis mundial y la imposibilidad de acompañar a los seres queridos en los últimos momentos, pueden hacer el duelo mucho más difícil de superar. El apoyo y acompañamiento que reciba un doliente serán cruciales para su recuperación, es por ello que, si dentro de tu círculo social hay una persona que está enfrentando el duelo, sepas cómo reaccionar y que tu compañía realmente sirva como contención emocional, y no como un obstáculo para la recuperación.
¿Cómo pueden tus palabras llegar a ser el alivio para el deudo? Es verdad que nadie nos prepara para ese tipo de situaciones, por lo que es común llegar a decir algo inapropiado que perjudique más la salud mental de quien atraviesa el luto. Sin embargo, hay una serie de consejos que podemos seguir ante estas situaciones.
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- No alientes la represión de emociones
“No llores”, “no estés triste”, “ya pasará”. Este tipo de frases son de las peores opciones para decirle a alguien que acaba de pasar por una pérdida. En esos momentos difíciles, lo mejor es que el doliente se permita sentir todo el dolor que le provoca la muerte de su ser querido. Entonces, es mejor que le digas algo como “llora todo lo que necesites, estoy contigo”, “ojalá existieran palabras para hacerte sentir mejor, pero sabes que siempre tendrás mi hombro para llorar”. Reprimir la tristeza no será benéfico para quienes han perdido a alguien, por el contrario, alargará el proceso de duelo al no permitirse sentir y aceptar lo sucedido.
- No preguntes qué puedes hacer, solo hazlo
Es muy común querer ofrecer ayuda al doliente con un “dime si necesitas algo”. Sin embargo, es muy poco probable que éste realmente te tome la palabra, ya que se encuentra en un estado de dolor que no le permitirá enfocarse en lo que “necesita”. Seguramente habrá algo que esté a tu alcance que puedes hacer, aunque no puedas acudir a su casa debido a las restricciones sanitarias.
Envía comida a su domicilio, apóyalo económicamente con lo que te sea posible, hazle una videollamada, o en caso de que sí puedas visitarlo, ayúdale con los quehaceres del hogar para que pueda descansar. Pero no esperes a que te llame y te diga “llevo tres días sin ánimos de limpiar mi casa, ¿me ayudas?” Sólo ponte en su lugar y manos a la obra.
- Acompaña durante el duelo, pero deja espacio
La compañía y apoyo serán vitales para que una persona en duelo se recupere. Sin embargo, procura no estar todo el tiempo encima de él y darle su espacio para estar a solas. Esto es muy importante para que pueda reconocer y aceptar sus propios sentimientos, además de desahogarse como lo necesite. Hazle saber que respetarás si quiere estar a solas, pero que seguirás pendiente de lo que necesite.
- Alienta a hacer otras actividades
Cuando hayan pasado unas semanas de la pérdida del ser querido, puedes invitarlo a hacer cosas que sabes que disfrutan o que hace tiempo no hacen: invítalo al cine, a comer, a hacer un pequeño viaje. En caso de que en tu ciudad prevalezcan las restricciones por el Covid, podrías proponerle ir a su casa para jugar juegos de mesa o ver películas o incluso jugar videojuegos en línea. Todo depende de los intereses de esta persona y, además, es muy importante no querer forzarlo a hacer algo.
Si te dice que no tiene ganas de hacer nada de lo que le propongas, simplemente no insistas, pero hazle saber que cuando esté listo, tú estarás ahí para acompañarle.
- Busca a un especialista
En caso de que el proceso de duelo esté siendo demasiado difícil para tu ser querido, puedes proponerle buscar la ayuda de un especialista en tanatología, quien lo guiará por el camino de la aceptación para recobrar la paz en su vida. El duelo es diferente para todos, y si no se tiene la ayuda adecuada, es posible desarrollar problemas de salud derivados de la depresión. Háblale a tu ser querido de la posibilidad de acudir con uno de estos especialistas y ofrécele acompañarlo.
En Monitor Médico podrás encontrar a los mejores especialistas en tanatología para ayudar a tu ser querido a afrontar el duelo de la manera más sana posible y comprender la muerte como un proceso natural y no como un castigo.
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